18 de agosto de 2011

Ética y Deontología Jurídica - Reflexión Clase 1.

La actividad que realizamos el primer día en la clase de Ética y Deontología Jurídica estuvo fuera de lo que comúnmente se esperaría de una clase típica del “primer día de clases” en donde los profesores muestran su plan de estudios, nos muestran cuáles son sus reglas, lo que esperan de nosotros como estudiantes; considero que fue bastante acertado por parte del profesor hacer esa clase de actividades ya que es una forma de conocernos a nosotros mismos y a nuestros compañeros.

Con respecto a conocernos a nosotros mismos es en relación al esquema que se hizo de los valores de mi generación y los defectos de la generación de nuestros padres. Y me resulto interesante el descubrir que lo que yo creía que eran defectos de mis papás también son los míos y aquellos valores que considero míos son de igual manera de mis padres. Porque nosotros no podemos ser otra cosa que el reflejo de ellos.

Pero en el caso de los defectos de la generación de mis padres no sé por qué se me hizo muy difícil encontrar alguno, la única aportación que pude dar a la clase fue decir que eran chantajistas y es porque así son mis papás conmigo; que me dan una cosa por otra que yo les dé. Pero sí pude identificarme como paranoica frente a ciertas cosas que hacen mis hermanos pequeños.

Y con respecto a la actividad de la bolsa de valores, puedo decir que la necesidad de tener más; es decir la ambición nos obligó a trabajar en equipo, por mi parte puedo decir que tuve una actitud desconfiada frente a un boleto que compre que según yo, ya había pasado y por ello lo vendí y que a fin de cuentas aún no lo había nombrado el profesor. Y el primer boleto que compré, no lo vendí ni nada para probar mi suerte. Sin embargo, sí note que compañeros que vieron cuál era mi número se portaron poco solidarios al andar gritando el número que tenía para que éste fuera quitado de la lista. Es por ello que digo que en este tipo de actividades se puede observar cómo somos en realidad. Puedo concluir que ni gané, ni perdí ya que terminé con los tres mil pesos con los que empecé, pero de igual forma me divertí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario